Datos y emoción o cómo convencer a los escépticos

En el fondo lo sabemos…pero lo olvidamos cuando hacemos una presentación o cuando intentamos convencer a un tercero: los datos, simplemente, no son suficientes. Un dato puede servir para afianzar y reforzar un argumento; puede servir, quizá, para convencer a quien no tiene formada opinión pero, en general, cuando alguien ha adoptado una posición, aplica…