Ya hacia el final de su libro ‘The Startup Way‘, Eric Ries torna sus ojos hacia las políticas públicas que pueden favorecer la innovación y, sobre todo, el emprendimiento.
Pensando en cómo favorecerlo, Eric Ries se pregunta sobre lo que mueve y lo que preocupa a los emprendedores con la idea de establecer esas políticas que favorezcan las motivaciones y disminuyan las preocupaciones.
Y, según su experiencia, la motivación de los emprendedores está invariablemente unida a tres grupos de factores. Estos:
- Visión y optimismo: deseo de mejorar el mundo
- Habilidades y recursos: habilidades especialmente relevantes en los primeros pasos de su startup pero también el acceso a recursos.
- Riesgos y responsabilidades: les obsesiona el fracaso y la forma de eliminarlo y, también cubrirse frente a deudas, obligaciones, pasivo…
La perspectiva no es, como se puede apreciar, tanto de una motivación individual, sino, más bien, los factores que animan o desaniman al emprendimiento es decir, más los factores extrínsecos, sobre los que pueden actuar las políticas públicas que intrínsecos, que, evidentemente, son más individuales.
Si existen políticas que tengan en cuenta este tipo de motivaciones y son capaces de usarlas inteligentemente para favorecer el emprendimiento, habremos ganado mucho.